“La unión hace la fuerza”

“El equipo es genial, somos una familia y eso se nota cuando jugamos”

“Este es mi equipo, daría todo por ellos”

Estas frases representan muy bien ese concepto tan mencionado, y anhelado en algunas ocasiones, en el mundo del deporte, ser un verdadero EQUIPO.

Si has tenido la oportunidad de formar parte un grupo dónde todo el mundo remaba en la misma dirección, había muy buena relación entre todos sus integrantes y, además, vuestro rendimiento fue extraordinario, seguro que entiendes a la perfección a lo que nos estamos refiriendo.

Pero, me gustaría hacerte una pregunta…

Cuando el equipo pasó por momentos complicados, ¿Cuál fue su reacción?

Si tu respuesta es “Nos unimos más y aguantamos todos juntos hasta el final apoyándonos los unos a los otros”, entonces, puedes afirmar con rotundidad que erais un equipo COHESIONADO.

La cohesión grupal es la tendencia de cualquier grupo a mantenerse unido en el camino hacia la consecución de sus objetivos.

Uno de los principales objetivos de cualquier entrenador o jugador es crear o contribuir a que su equipo esté cohesionado, unido. Sin embargo, solemos confundir este término con aspectos como llevarse bien, hacer comidas o cenas de equipo, reírnos entre nosotros, etc. Y la realidad es muy diferente.

De hecho, las mejores oportunidades que tiene un equipo para demostrar si realmente está o no cohesionado son cuando las cosas no suceden como teníamos planeado. Cuando los resultados no acompañan o cuando nos encontramos en una “mala dinámica”, el grupo debe decidir cómo reaccionar:  permanecer unidos o hacer cada uno la guerra por su cuenta.

Si tomamos el primer camino, esto nos ayudará a crecer como deportistas y como personas ya que, irremediablemente, habremos decidido seguir confiando en nuestros compañeros, entrenadores y demás personas del equipo, consiguiendo así fortalecer la cohesión y la unión del equipo.

Estas situaciones son la prueba de fuego de la cohesión, sin embargo, si queremos reaccionar de la manera adecuada cuando la cuerda se tense, hemos de tener los deberes hechos.

 

¿Qué podemos hacer para favorecer la cohesión dentro de nuestro equipo?

Esta es la pregunta del millón, ¿Y yo qué puedo hacer? Pues bien, aquí te dejamos una serie de pautas que puedes seguir para construir un equipo verdaderamente cohesionado.

Si eres deportista, lo primero que has de tener en cuenta es que la clave de la cohesión es conocer a tus compañeros y compañeras. Para poder generar buenos vínculos con las personas es necesario conocer su forma de ver el mundo, sus creencias, pensamientos y, sobre todo, tolerarles y respetarles. Las faltas de respeto no tienen cabida en un equipo cohesionado, de hecho, la erosionan profundamente. Por ello, cumple con las normas que habéis establecido como equipo, comprométete con tu mejora individual, la de tus compañeros o compañeras y, por encima de todo, muéstrate disponible para ayudar en cualquier momento, tus compañeros de viaje te la devolverán.

Si eres entrenador, una de las claves que más tendrás que fomentar es la Comunicación, entre tú y los deportistas y entre ellos mismos. La comunicación es la única manera de entender a los demás y de transmitir nuestra visión sobre la realidad. Gracias a la comunicación podrás exponer de forma clara y precisa aquello que esperas de cada uno de ellos, tus expectativas, generando una gran confianza y un clima de seguridad para los deportistas.

Por último, hay un ingrediente totalmente necesario para poder construir un equipo cohesionado. Ese elemento es el tiempo. Para poder aplicar las pautas que hemos descrito anteriormente es necesario pasar mucho tiempo juntos, de manera que podamos interactuar y conocernos. Además, este tiempo debe invertirse en diferentes contextos, no solo el deportivo, también en otro tipo de actividades que nos permitan conocer otras facetas de nuestros compañeros y compañeras. Por eso, las concentraciones, reuniones de equipo, salidas a pasear y demás actividades son tan beneficiosas para la cohesión grupal.

Todas estas medidas harán que la cohesión del equipo aumente con el transcurso de la temporada reflejándose en el compromiso de todos los miembros del equipo con el mismo.

¡Ahora es tu turno!

¡A cohesionar!