¿Estás siempre en las nubes?

¿Te lo dicen a menudo? ¿Sueñas despierto/a con tus objetivos?

Todos creamos películas en nuestra mente sobre las cosas que queremos que pasen o, al contrario, las que tememos que sucedan. Todo imaginamos… pero… ¿Has pensado que eso afecta a tu rendimiento?

Sí, como lo oyes, soñar es gratis pero puede salir caro si no cuidamos el guion de la película.

Al igual que nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestro entorno o nuestras motivaciones… debemos aspirar a elaborar ensoñaciones de calidad que nos sumen y sean positivas para nosotros.

 Pongamos un ejemplo:

Imaginad que el próximo domingo tenéis una competición para la que lleváis entrenando muchísimo tiempo, es una competición importante y la tenéis muy presente.

Opción A: Te sientes impaciente por que llegue el domingo, repasas mentalmente tus jugadas, tus ataques o tu estrategia, prevés qué dificultades pueden surgir y cómo superarlas, recuerdas todos los entrenamientos acumulados, todo el trabajo, te sientes fuertes y te dices que puedes. Te imaginas lográndolo y disfrutando de toda la jornada. Vas a ir a por todas.

Opción B: Te sientes impaciente por que llegue el domingo. Es una fecha muy esperada y al mismo tiempo, sientes mucha presión. Es el día X, hay que demostrar todo lo entrenado, hay muchas personas que han apostado por ti y no quieres defraudarlas. Repasas tu plan de competición mentalmente, pero a menudo dudas e imaginas situaciones en las que no salen las cosas como querrías o se complica la competición. Imaginas la decepción que sería no hacer una buena competición. Vas a ir a por todas, pero tienes ganas ya de que termine y quitarte esos nervios.

 ¿En qué situación os sentiríais mejor a la hora de competir? ¿Qué opción te ayuda a sacar tu máximo rendimiento? ¿Qué “película” mental te suma y cuál te resta?

 No te preocupes si te sientes identificado/a con la Opción B porque os traemos un secreto a voces: Ser la opción A también es entrenable.

 ¿Conocéis la visualización?

La visualización es la técnica psicológica que nos ayuda a sacar el máximo potencial a nuestra imaginación.

Consiste en crear o recrear situaciones en nuestra mente. Podemos emplearla para entrenar nuestras habilidades técnicas, tácticas y psicológicas en entrenamientos, competiciones y rehabilitación, en el caso de que estemos lesionados, etc.

El límite de la técnica es nuestra propia capacidad para imaginar.

Pero ¡eso sí! Es muy importante controlar nuestras “películas” mentales para imaginar exactamente lo que queremos imaginar, cuanto más realista mejor.

Si queremos trabajar nuestra concentración y nos despistamos, si queremos trabajar nuestra autoconfianza y nos centramos en nuestros puntos flacos, o si queremos trabajar nuestra técnica y no logramos imaginar el gesto correcto…

No sólo no tendrá ningún efecto, sino que puede ser perjudicial.

¿Qué pasos debemos dar para empezar a entrenar en visualización de forma correcta? 

1º- Elige tu objetivo:

¿Qué destreza quieres trabajar? ¿Quieres aprender un gesto técnico nuevo? ¿Quieres repasar una jugada táctica? ¿Quieres aumentar tu motivación en un entreno largo? ¿O tu concentración justo antes de la competición?

Recuerda, el límite de la técnica es el límite de tu capacidad de imaginación por lo que puedes emplearla con multitud de objetivos distintos

2º- Elabora el guion de tu “película mental”: 

Qué vas a imaginar para trabajar el objetivo. Escríbelo con todo detalle (tiene que ser una película casi en 3D).

3º- Visualiza tu película mentalmente:

Dedica un tiempo previo a respirar para poner toda tu mente en la imagen. Pon esfuerzo en poder ver, oír, moverte en tu película casi casi como si lo estuvieras haciendo en la realidad. Añade también pensamientos y emociones que quieras evocar para tu objetivo.

Y, más importante aún, cuando visualices tu película no te vayas a la ¡sala de al lado! Visualiza la película que has redactado.

4º-  Registra tu entrenamiento para mejorar: 

¿Has conseguido vivir tu película? Del 0-10 qué viveza tenía la imagen en tu mente.

¿Has conseguido ver la película que querías? Del 0-10 qué control tenías sobre la imagen en tu mente.

Con tiempo, esfuerzo y constancia, irás mejorando en tu puntuación y podrás trabajar con visualizaciones más complicadas.

Por último: da igual si eres el protagonista de la película o el narrador, o si a veces ves la película en primera persona y otras en tercera. Lo más importante es que seas capaz de controlar la imagen e imaginarla de forma muy realista.

¿Quieres aprender más sobre esta técnica y las claves para usarla? ¿Quieres mejorar tus habilidades físicas, técnicas, tácticas y psicológicas a través de tu imaginación? ¿Quieres entrenar la Opción A?

En la Comunidad MR dedicamos el mes de febrero a la técnica de la Visualización

https://maxrendimiento.com/comunidadmr

Inscríbete para aprender sobre ella y cómo empezar a trabajarla con ejercicios prácticos y resolución de dudas.

https://maxrendimiento.com/comunidadmr-planes